¿Y si volviéramos a vernos?

Aquí voy a empezar con mi primer fic... XD Sean buenos xDDD

Capítulo I

Seguía llorando sin poder parar, se había ido, para siempre y ya no iba a volver, jamás. Por mucho que la echara de menos y la recordara cuando yo no era más que una niña.
No estaba allí con su dulce, frágil y cálida voz con la que me cuidaba, me dormía y sencillamente, me quería.

Habían pasado ya cuatro horas desde que me habían llamado del hospital, mi madre había despertado del coma y quería verme. Eufórica colgué el teléfono y me dirigí a verla. No hacía más de medio día que había estado con ella, leyéndole en la cama, yo que me imaginaba que me escuchaba mientras le contaba la historia. La misma historia que ella me contaba, poniendo las mismas voces que ella ponía cuando yo era pequeña.

Volví y la encontré tumbada mirando la televisión, como si nada hubiera pasado. No me lo creía. Brotaban lágrimas de mis ojos, de la alegría que sentía al poder verla de nuevo. Me abracé a ella, no quería soltarla.
"Te quiero, hija mía" me dijo al abrazarla.
-Aunque no me queda mucho en este mundo, tú siempre sabrás que te quiero, que te estaré vigilando desde allí arriba, y que siempre estaré aquí... en tus recuerdos. -Explicó mientras empezaba a llorar.
Me soltó y tomó mi mano. Yo no podía decir nada.
-Quiero que..tengas esto.-;e dijo mientras abría mi mano y me hacía entrega de un pequeño sobre blanco, en el se hallaba una carta escrita a mano por ella. Abrí el sobre y leí la carta en voz baja. Sin apenas darme cuenta ella ya había cerrado los ojos, para siempre, y nunca más...los abrirá.

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Capítulo II

Llevaba las cenizas hacia su playa favorita, allí descansaría en paz, para siempre.
Aquel lugar siempre tan colorido y lleno de vida se había tornado en uno tétrico, siniestro y, en definitiva muerto.
Comenzaba ya a chispear, algunas gotas tocaban brevemente mi nariz, junto a mis lágrimas formaban un río en mis mejillas sonrosadas. Finalmente dije unas palabras, aquellas palabras que no pudieron salir de mi boca cuando mi padre falleció.
-Mamá, descansa en paz. –Concluí y acto seguido esparcí sus restos por el acantilado en el que conoció a mi padre, ese sitio en un principio feliz y del que, ahora, disfrutará para siempre.
Me metí en el coche y volví a leer la carta, el último regalo que me hizo, sus penúltimas palabras. Encendí el motor y marché a casa. La tenía para mí sola. ¿Cómo afectaría este gran cambio a mi vida?
Solté las llaves en la entrada, el gato se restregó por mis piernas y lo aparté suavemente. Cogí algo de comer y me senté en el sofá. Miraba la tele sin prestarle atención, comía sin apetito y poco a poco me quedé asumida en un profundo sueño…
Desperté en un hospital. ¿Qué estaba haciendo allí? Vagaba sin rumbo por él. Intenté gritar. Nadie me oía. Lloré. Nadie me vio. Marché hacia la puerta. No podía salir. ¿Qué pasaba? Era todo tan real…
Entré en una de las habitaciones, no me podía creer lo que estaba viendo…
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Capítulo III

La habitación estaba a oscura. Aún así podía ver un par de sombras. Una de ellas inmóvil en la camilla y la otra que se movía lentamente sobre la primera. Se escuchaban llantos y leves sollozos. Reconocía esa voz. Era mi madre. El médico entró de nuevo en la habitación para hablar con ella.

De repente vi a una niña pequeña, de unos nueve años. No era muy alta, pero tampoco bajo, de ojos grises y pelo largo castaño, con dos coletitas unidas en la parte trasera de la cabeza. Llevaba puesto una faldita vaquera con unos leotardos y una camisa de botones blanca. Tenía aspecto triste y se notaba en sus mejillas sonrojadas que había estado llorando. Era yo.

Aún podía recordar ese momento, aquel momento en el que todo parecía haber cambiado. Solo el recuerdo de mi madre llorando cada día, el recuerdo de las Navidades sin mi padre… todo… me dolía.

Comencé a sentir un fuerte dolor en el pecho y volví a abrir los ojos. Seguía en el sofá, arropada por una manta, los platos en la mesa y la tele encendida: Otra vez uno de esos estúpidos programas de cotilleos. La apagué y recogí los platos. A continuación, cogí un libro de la estantería, era un libro de poesía romántica. Lo abrí y cayó algo de dentro…
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Capítulo IV

Entre las páginas del hermoso libro -era mi favorito- apareció una fotografía antigua, que cayó al suelo. La recogí y la miré atentamente, fijándome en todos y cada uno de los detalles.
Un rostro puntiagudo, ojos claros y nariz y boca completamente simétricas. Pelo un poco canoso, pero atractivo. La parte de atrás cortita y con un poco de flequillo que se dejaba caer por su rostro en dos mechones de cabello que apenas le tapaban los ojos. En su boca, con sus labios rosados, se podía observar como esbozaba una pícara sonrisa.

Realmente me asombró encontrar esa foto, pues no la había visto con anterioridad. La volteé y pude leer una fecha: Era el día de la muerte de mi padre. ¿Quién la había escrito? ¿Quién la había puesto allí? ¿Por qué no conocía esa foto de mi padre? Esas y otras miles de preguntas rondaban por mi confusa cabeza. Estaban pasando muchas cosas en solo un día -aunque algunas solo eran producto de mi alocada imaginación…- y para mí eran más que suficientes, de momento…

Estuve dándole muchas vueltas al asunto de la foto, al sueño que tuve… Recordé la carta de mi madre.
-Tantas dudas... -dije en voz alta. A lo que el gato, ese estúpido animal que le regalaron a mis padres, me contestó con un maullido. Supuse que tendría hambre. Fui buena y le puse un platito con leche y una lata de comida para gatos con sabor a salmón.

Me desvestí lentamente y alcé una de las piernas hasta que tocó el suelo de la bañera. El agua quemaba. Me gustaba tal y como estaba. Introduje la otra pierna y poco a poco el resto del cuerpo. Disfruté ese baño, del que casi no salgo con vida…

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TO BE CONTINUED

Si volvieramos a vernos, pues nos veriamos (¿?)

Parida aparte xD, como ya te he dicho, mola, ya tenemos un misterio que el supuesto sobre blanco, que a saber que contiene. Hay drama, pues las muertes traen eso xD.

Y poco mas que decir, haber el siguiente cap que nos trae.

:O Mia me dejaste con la duda de lo que dice el sobre, seguilo que esta muy bueno

Pinta muy bien Mia, seguire de cerca este fic ^^

Vaya, bastante emotivo... Espero que continues con la historia, el planteamiento me ha parecido muy interesante.

Bueno! como ya te dije en su día...
Me gusta por el momento!
A ver como lo desarrolas ;O

Bueno, ya me he animado a leer esto. Solo decirte que si revisas los escritos una vez acabados, podrás hacerle una limpieza con la que tendrá buena presentación. Por lo demás, me gusta, y más que interesarme por ese sobre, me da pena que después de volver a la vida su madre haya muerto definitivamente. Espero próximo capítulo.

PD: Parezco un amargado aquí sin poner ninguna "XD", pero es porque, no sé, porque sí.

Nuevo capítulo :3

Buen capítulo, aunque quizás excesivamente corto. Me gusta el principio, luego cuando llega a ese supuesto hospital empieza a sonar un pelín paranoico. A ver qué resulta ser en el próximo capítulo, ¡ánimo escribiendo!

Tercer capítulo listo! :3

Me encanta este fic, crea otro capítulo pronto que me tienes intrigado :3

Parece que el fic se centra especialmente en las emociones de la protagonista, y no me extrañaría nada que esa carta tenga algo que ver incluso. Bueno, a ver qué ocurre después de eso, ¡a seguir así!

Muy bueno los ultimos capitulos Mia, me esta gustando muchisimo, sigue asi ;)

Mia La Mística escribió:Ya tengo el cuarto capítulo. ¿Qué hago, lo subo?

Claro que si! ¬3¬ xDD

Juas, la tía esta se puede suicidar con cualquier cosa oye XDDD. Capaz de quemarse y todo la pobre o.o. Bueno, capítulo interesante, lo de la foto me agradó. Espero el próximo capítulo.

PD: Solo un pequeño detalle, no es realmente "suelo de bañera". Ahora no caigo como se llama, pero en fin, supongo que lo pusiste para que quedara bastante claro a qué te referías XDD

Que bien me hizo caso!!! xDDD
Genial como siempre Mia, sigue asi, que estas haciendo un gran trabajo :P

Me he leido los 4 capitulos de un tiron, es una historia un poco bastante mucho tragica. Sigue así ¿Que pasara en la bañera?