Fic: La melancolía de la oscuridad (Contiene SPOILERS sobre T&T) ~Finalizado~

Bueno, me he decidido a rescatar mi fic del otro foro, aunque os recomiendo que lo leáis solo si os habéis pasado el T&T, de lo contrario vais a ver muuuuchos spoilers -.-' Bueno, y ahora sin más, el primer capítulo, Feliz lectura! ;)

La melancolía de la oscuridad


Capítulo 1: Enterrado en la oscuridad

Han pasado ya algunos meses, pero aquel caso dejó huellas en nuestros corazones. El caso de Terry Fawles, por supuesto. Aquel hombre fue una simple marioneta, pero Mia y yo sabemos la verdad detrás de todo esto. Si ese pobre condenado hubiese tenido algo más de personalidad... En fin, no se puede hacer ya nada. Hoy, la verdadera criminal me ha citado en la cafetería de los juzgados. Quizás Mia también debería venir, aún recuerdo sus palabras...

-Diego, es peligroso que vayas solo.
-¿Qué podría hacerme esa cría?
-No lo sé, pero tengo un mal presentimiento...
-Tranquila, sé cuidarme solo.

Ella es... Distinta a los demás. Todos los otros abogados que conocí, siempre se rendían antes de tiempo, pero ella no. Ella tiene ese brillo en los ojos, ese espíritu... Nada puede detenerla cuando se propone algo, de eso estoy seguro. Solo espero que esta vez se equivocase con su presentimiento... De todos modos no se atreverá a hacerme nada a plena luz del día en la cafetería de los juzgados. Pensando en Mia, espero que esta noche pueda aclararle algo más mis sentimientos hacia ella en el restaurante, lo tengo todo preparado desde hace tiempo. Hoy será un día especial, estoy seguro. En fin, ya he llegado, veamos que tenía que decirme la señorita Hawthorne. Está allí, en la oscuridad de un rincón.

-Vaya, hacia tiempo que no le veía, siéntese, le he pedido un café.
-Un buen detalle por su parte, empezaba a echar de menos éste aroma por el camino -cogí la taza y tomé un trago.
-Bien, ésta reunión ha finalizado.
-¿Cómo dice?
-Tengo prisa, he de marcharme.
-¿Y para eso me ha citado aquí?
-Sí, ya ha hecho todo lo que tenía que hacer.
-¿Cómo?

Entonces lo noté, un profundo dolor en el pecho, como una puñalada. Hawthorne sonrió y se fue apresuradamente.

-A... Ayuda, por favor...
-Señor, ¿se encuentra bien?
-Creo que han envenenado mi... café.

En ese momento, perdí la consciencia. Cuando la recuperé, todo estaba oscuro a mi alrededor. No podía moverme por más que lo intentaba, no veía nada, tan solo escuchaba el incesante pitido de un aparato que medía mi pulso, una y otra vez. En ese momento me dí cuenta, estaba en coma. La desesperación me inundaba por dentro, ¿cómo podría salir de allí? Intenté gritar, escapar de aquella prisión sin luz, pero no podía hacer nada. Aún estaba gritando por dentro cuando abrieron la puerta.

-Doctor, ¿se recuperará?

Aquella voz, aquella dulce voz... Era Mia, Mia estaba allí a mi lado.

-Mia, ¡ayúdame por favor!
-Verá, señorita Fey, el señor Diego Armando ingirió una dósis de veneno, aún no sabemos cuál fue la vía por la que lo hizo. Afortunadamente, la dósis no lo mató, su pulso se mantiene estable. Puede despertar en cualquier momento, o puede quedarse así durante un tiempo.
-¿Durante cuánto tiempo aproximadamente?
-No es posible saberlo con exactitud, pueden ser solo unos días, o pueden ser años.
-Entiendo...
-Le dejo a solas con él, dicen que hablarle a los pacientes suele ayudar a su recuperación.
-Gracias por todo lo que ha hecho, doctor.
-No hay de qué, señorita Fey.

Escuché al doctor salir de la sala, y a Mia sentándose cerca de mi, tan cerca... Podía escuchar su respiración, tan suave y pausada... Sin previo aviso, Mia comenzó a llorar, podía escuchar sus sollozos. Lloraba intentando silenciar su propio llanto, pero le resultaba imposible.

-No llores, estoy bien -ella no podía oirme, algo que me desquiciaba aún más.

Apoyó su cabeza sobre mí, pude sentirlo. Entonces comenzó a hablar...

-Diego, todo este tiempo no te conté nada, no tuve el valor suficiente, y ahora ya... -un ligero sollozo interrumpió sus palabras-. Ya no puedes escucharme... Aún así, sabes tan bien como yo todo lo que siento por ti, y te prometo que no voy a olvidarme, no mientras me quede la esperanza de que algún día abras los ojos...
-Mia...
-Fue ella, estoy segura. Fue Hathorne quien te envenenó para silenciarte, pero no dejaré que se salga con la suya. Diego, te prometo que algún día pagará por lo que ha hecho, conseguiré que la declaren culpable, por ti. No debí haberte dejado ir a aquella reunión, fue todo culpa mia...
-No, no digas eso, tu no tienes la culpa...
-No te preocupes, algún día conseguiré demostrar que ella está detras de todo esto, y entonces volveré para contártelo, te contaré su derrota... Volveré siempre que pueda, para estar a tu lado. Adiós...

Mia se levantó y se fue. Me quedé solo de nuevo, en aquella asfixiante oscuridad. Tan solo podía pensar en Mia, en ella y en como estaba sufriendo. Al menos tendría el consuelo de poder escuchar su voz, que era lo único que me hacia olvidar la permanente oscuridad que me rodeaba. Sé que atrapará a Hawthorne, algún día. Espero haber despertado para entonces, y cuando despierte, seremos felices, los dos juntos...

-Ya estoy aquí otra vez -decía su dulce voz-. Ayer le dí la noticia a Grossberg, se ha puesto en contacto con tus clientes para hacerse cargo de tus casos... Aún se me hace difícil la idea de que no estés junto a mi, sino en ésta habitación de hospital, tendido en la camilla... Espero que tu no lo pases mal al menos, cuando despiertes me tienes que contar todo lo que recuerdes, ¿vale? -no lo ví, pero pude adivinar que en su cara se dibujaba una pequeña sonrisa cargada de dolor por dento-. Ayer estuve en aquel restaurante en el que había reservado la cena, aunque si te digo la verdad, sin ti carecía de sentido estar allí. Esto está muy oscuro, ¿cómo pretenden que te despiertes sin un poco de luz? -escuché como abría la ventana de la habitación. Debe de ser triste estar aquí todo el día... Solo espero que te despiertes pronto, si no, no sé que haré sin ti... Bueno, tengo que irme -me dio un beso en la mejilla-. Te quiero.

De nuevo salió de la habitación, dejándome en mi oscuridad, tan solo... Ella estaba sufriendo más aún que yo, y yo no puedo hacer nada por ayudarla, si al menos pudiera comunicarme con ella... Quiero salir de aquí, salir y poder estar con ella, si tan solo pudiera hacerlo durante un instante... Toda la culpa la tiene Hawthorne, pero juro que me vengaré, cuando despierte haré que la condenen, sea como sea. Mientras tanto, no sé qué haré, supongo que tengo tiempo para pensar... Maldita sea, encima no tengo ni una gota de café...

Unos meses más tarde

-Hola de nuevo, estoy aquí para darte una nueva noticia, cariño. Mañana volveré a los tribunales después de aquel caso, es genial, ¿no te parece? El acusado es bastante joven, como se llamaba... Ah, si, Phoenix Wright, está estudiando para ser abogado defensor. Bueno, volviendo al caso, esta vez me ayudará el viejo Grossberg, es un buen hombre, pero no soporto que hable de sus... esto... problemas, ya sabes. Me gustaría más que me ayudases tu, como aquella vez, pero seguro que me estás dando ánimos, de alguna manera. Voy a ganar este caso, y no lo haré solo por mi cliente, que es inocente. Lo haré también por ti, para demostrarte que soy una gran abogada. Bueno, hoy tengo poco tiempo, lo siento. Mañana después del juicio vendré a contarte que tal me ha ido. ¡Hasta mañana!

El caso ha conseguido que se olvide un poco de lo que ha sufrido todo este tiempo, me alegro mucho por ella. Yo sigo aquí, encerrado en una jaula que resulta ser mi propio cuerpo. Todo este tiempo ella ha venido, día tras día a verme. De hecho, ella es lo único que me queda... Ésta impotencia que siento, esta sensación que me rodea... Acabaré volviéndome loco en este infierno sin luz. Y encima mi pelo, por lo que Mia me contó, está empezando a clarearse. Si hubiera sido otra persona me habría sentado mal, pero ella me lo contó riendo, con aquella alegre risa suya. Merecía la pena aunque solo fuese por escucharla reir alegremente. A mi solo me quedan sus visitas, las espero día tras día, mes tras mes. Tengo suerte de que alguien como ella se haya fijado en mi, una suerte increíble. Tan solo quiero despertar por fin, y poder pasar el resto de mis días con ella... Al día siguiente ella volvió, su voz estaba eufórica y alegre.

-Diego, ¡he ganado el juicio! Te dije que podía hacerlo, ahora me siento de nuevo con fuerzas para continuar adelante. Y además, tengo una noticia que te sorprenderá mucho. En el mismo juicio conseguí averiguar quién era el verdadero asesino, y no puedes imaginarte quien. Era ella, Diego, ¡era Dahlia Hawthorne! He conseguido demostrar su culpabilidad en el juicio, y seguramente será condenada. Estoy tan feliz, Diego... -ella comenzó a llorar de nuevo-. No te puedes imaginar lo que significa esto para mi... Ella es la responsable de todo lo que te está pasando y por fin va a recibir su justo castigo... Ahora seguiré trabajando en más casos, pero cada día vendré a visitarte, no te dejaré nunca. Cuídate mucho, te quiero.

Otra dulce despedida... No puedo evitar que me duela escuchar como se marcha cada vez... Pero ésta vez se ha marchado contenta, decidida, y tiene un gran futuro por delante, lo sé. Lo que me sorprende es que haya pillado ya a Hawthorne, parece ser que el mundo es un pañuelo al fin y al cabo. Respecto a mi, sigo esperando el día en el que despierte. Lo único que deseo es poder disfrutar de ese momento con ella, tan solo eso ya me bastaría para ser el hombre más feliz del mundo, bueno, eso y una taza de café, con su fragancia... La fragancia de la oscuridad.

*.* tu si que vales para escribir ^^

Davu, como ya te dije, me encanta como escribes, vales para esto, eres mi "ficcero" favorito. ;) Y el fic es tan hermoso... Loving Miego. 4ever....

*_* wow.....es..... :( precioso T____T *_*
espero ya mas capitulos eh ? :king:


saluds¡¡ *_*

Y no lo dejes a medio ¬¬ que si luego te encuentras en tu cama una cabeza de caballo yo no he sido O.o xD

Apollo Justice escribió:Y no lo dejes a medio ¬¬ que si luego te encuentras en tu cama una cabeza de caballo yo no he sido O.o xD

(Nota mental: Activar el escudo anti-cabezas de caballo XD) Tranquilos que no lo dejaré a medias, intentaré (repito: intentaré XD) hacerlo con algo de continuidad... Muchas gracias por vuestros comentarios, la semana que viene el capítulo 2, aunque los más avispados pueden verlo bastante antes... ;)

Cabezas de caballo,de perro,de pez tengo variadas xDDDDD tu pon y no hare como en el padrino ^^ xd

Absolutamente fabuloso, me ha encantado, desde luego tu si que vale para escribir Neil Edgeworth ^^ , en serio, te animo a seguir asi ;)

Ya lo habia leido, pero me he vuelto a emocionar :P Escribes genial! Tu tia (yo xd) esta bien orgullosa de su sobrino. Espero con ansias el siguiente capitulo ^^
Salu2!

Es precioso, pensaba que lo habias sacado de algun sitio y luego leo en los coments que lo has escrito tu. De verdad te lo digo, vales para esto, a ver si hay 2 parte, aunque ya se sabe como acaba. Sigue así!

Has describido la tortura que tuve que soportar, T-T, el que mejor lo a contado ni ese juego que se llama Phoenix Wright T&T lo describe tan bien. Un saludo... mi MiaAaAaAaAa...

Capítulo 2: El nacimiento de Godot

No sé cuanto tiempo ha pasado desde que estoy aquí, tampoco sé si conseguiré salir, esto es más desesperante de lo que podría haber llegado a imaginar. Antes era consciente de todo lo que sucedía, pero ahora estoy comenzando a perder el conocimiento. Aunque lo intento, no puedo escuchar todo lo que Mia me cuenta, es algo que me molesta mucho. Solo me pasa a veces, pero me sienta mal que ella venga a hablarme y no pueda prestarle atención del todo. Poco a poco voy sumiéndome en esta permanente oscuridad. Si Mia no viniera cada día, lo habría hecho hace ya mucho, pero afortunadamente ella tiene una volunad de hierro. Solo me queda esperar a que pase el tiempo hasta despertar, pero no estoy seguro de poder hacerlo... Si lo pienso detenidamente, esto no es tan distinto a la vida que rodea a los implicados de aquel caso... Enterrados bajo una capa de oscuridad y secretos, tan grande, que a veces absorbe a otros inocentes. está encerrada y esperando a ser ejecutada, pero aún queda algo, alguien de una maldad impresionante. No estoy seguro de por qué, pero sé que este asunto no ha acabado, aún no. Mia está siguiendo su gran carrera como abogada, no ha vuelto a perder ningún caso desde entonces. Estoy muy orgulloso de ella, pero hace tanto tiempo que no puedo ver su rostro... Eso es otra de las cosas que me asustan, ya casi no recuerdo su rostro. Por más que lo intente, no consigo recordar su aspecto. Quién sabe, quizás esto es una pesadilla más larga de lo normal, o eso espero... No creo que haya peor infierno que el que me ha tocado vivir, cada día que pasa la incertidumbre me va devorando por dentro. Si a Mia le pasara algo, estaría condenado a dormir para siempre, pero mientras ella siga a mi lado, tengo esperanzas, sé que llegará el día en el que despierte, más tarde o más temprano. Ella no quiere que la oiga, pero a veces me doy cuenta de que se queda en silencio... Y no le queda más remedio que llorar. Si estuviera en mi mano, ahora mismo acabaría con mi vida para que ella fuera feliz, es lo único que importa. Ahora ella es lo único que tiene sentido en mi caótico y oscuro mundo. Esto es como estar en el fondo de una buena taza de café, en una taza de oscuridad pura que me impide ver nada. Aunque siempre pensé que vivir rodeado de abundante café sería algo genial, pero ahora me doy cuenta de que en realidad es muy desquiciante. Es irónico que una de las cosas que más amo en este mundo me esté haciendo pasarlo mal como pocas veces lo he pasado en mi vida. Si al menos pudiera despertar, tan solo 5 minutos, poder ver algo que no sea la inacabable oscuridad que me acecha... Daría mi mejor paquete de café al que pudiera ayudarme a conseguirlo, aunque pensándolo bien, a estas alturas ya estará más pasado que el viejo Grossberg... Que desperdicio. Ayer Mia me confesó que volvería a seguirle la pista a un tipo extraño, que me daría más detalles en su próxima visita. Solo espero que no se meta en ningún lío gordo, si lo hiciera no podría perdonarmelo en la vida... Llevo ya un tiempo hablando con mis propios pensamientos, la verdad es que siento un poco de pena por mi mismo, pero supongo que es lo normal. Parece que han abierto la puerta, debe de ser Mia...

-Hola, Diego. Te dije que te comentaría algo más sobre ese tipo, ¿verdad? Su nombre es Redd White. Él es el culpable de que mi madre nos abandonara después del DL-6, a mi madre no le quedó más remedio que marcharse después de la información que ese desalmado publicó. White es un hombre muy rastrero, que no duda en emplear los métodos más sucios para conseguir los objetivos. Le he estado siguiendo la pista desde hace algún tiempo, pero con el caso de Hawthorne y todo lo que te pasó me despisté un poco. Hoy lo he visto en el bufete de Grossberg, él no me reconoció, o actuó cómo si no lo hiciera. Resulta que White está extorsionando al viejo Grossberg, solo sé eso. Eso y que igual que a Grossberg está extorsionando a altos cargos de todas las instituciones de la ley. Ahora mismo ese hombre es intocable, pero si consigo atacarle con su propia medicina, si consigo publicar la información necesaria, poco a poco las víctimas se volverán contra él. Entonces podré descansar tranquila. Quizás te esté abrumando con mis problemas, pero no tengo a nadie más con quién desahogarme, y además no se me ocurre ninguna persona mejor para que guarde mis secretos, en ti confío plenamente, Diego. Pensando en lo que llevas aquí, creo que ya he perdido la cuenta del tiempo. Cada vez que me levanto pienso en si tú habrás podido hacer lo mismo aquí, Diego... Ha pasado ya mucho tiempo, pero la vida sin ti sigue pareciéndome igual de extraña que los primeros meses... Te necesito a mi lado, Diego. Por favor, intenta despertar pronto, hazlo por nosotros...

Mia paró de hablar, és había sido su despedida de aquel día. Me preocupa mucho que ande detrás de semejante alimañana, pero supongo que podrá defenderse ella sola. Aún así, me gustaía poder estar a su lado para apoyarla y ayudarla en todo lo posible. Ella no merece pasar por lo que está pasando desde que yo me quedé en éste estado. No lo merece porque es la persona más maravillosa que he conocido en toda mi vida. No estoy seguro, pero si va a seguir dándome problemas como éste, creo que cuando me despierte dejaré el café, definitivamente... No, no sería capaz de perdonármelo. Aunque llevo un buen camino para dejarlo, ya llevo un buen puñado de meses sin ni siquiera olerlo de lejos... Supongo que lo hecho de menos, a mi manera.

Han pasado unos meses desde que Mia me dijo lo de aquel tipo, ese Redd White. Ella ha seguido viniendo e informándome de todo lo que sucedía. Ayer me contó que tenía una noticia muy importante que darme, una sorpresa. Me pregunto lo que querrá contarme, he estado preguntándomelo desde que se fue hasta ahora mismo. Acaba de abrirse la puerta otra vez.

-¡Hola, Diego! Hoy estoy feliz, ¿y sabes por qué? Porque ha quedado oficialmente abierto esta mañana el bufete Fey & Co., ¿qué te parece? Te prometí que lograría ser una gran abogada, y en eso estoy intentando convertirme. De momento es un bufete pequeño, y solo tiene a dos abogados. Yo, por supuesto, y ese chico al que defendí en el juicio en el que atrape a Hawthorne, Phoenix Wright, mi aprendiz. Él está muy contento por haber sido aceptado en mi bufete, lo considera un honor, pero siéndote sincera, es el único que se acercó a mi pequeño Bufete buscando empleo. Supongo que se acordó del juicio que ganamos hace un tiempo. Está algo nervioso todavía, prácticamente acaba de salir de la facultad, pero veo en él algo que le hace diferente a los otros nuevos abogados. No sé, puede que fueran imaginaciones mías. De momento lo he dejado en el despacho, por si acudía algún cliente, dejaré que vea cómo tiene que hacerlo en los tribunales antes de que comience con su trabajo de verdad. Espero haberte alegrado el día con la noticia, esto es un gran paso para mí. Por supuesto, cuando despiertes, tu también tendrás tu sitio en el bufete Fey & Co., no lo olvides.
¡Hasta mañana!

En su voz se notaba la alegría que sentía, no la notaba tan alegre desde que ganó aquel caso y derrotó a Hawthorne. Me alegro por ella, y también por ese abogado nuevo, seguro que es un buen chico. Últimamente estoy algo más positivo que hace un tiempo, supongo que las buenas noticias y la costumbre de vivir atado en la penumbra me habrán ayudado un poco, aunque eso no quiere decir que no siga sintiéndome algo mal. Espero que le vaya muy bien en su bufete, mientras yo seguiré esperando el momento de despertar...

-Buenos días, Diego -la voz de Mia me sacó de mis pensamientos-. El bufete va viento en popa, y mi aprendiz tuvo ayer su primer juicio, ¡y ganó! Estoy muy orgullosa de él, porque poco a poco conseguirá convertirse en un magnífico abogado, pero la verdad es que tuve que ayudarle un poco en el último momento, aún así, se esmera en buscar la verdad, como yo. En el juicio estuvo muy bien, logró incluso atrapar al verdadero asesino, ¿sabes? Resulta que era el testigo, la verdad es que no me lo habría imaginado nunca, a primera vista era un hombre algo... extraño, pero se comportaba de una manera bastante normal. Los dos estamos muy satisfechos por su victoria. Yo me siento orgullosa de él, y en parte satisfecha por mi, me he demostrado que puedo ayudar a los demás también. Cambiando un poco de tema, quería volver a hablarte de White, por fin estoy llegando al final de éste asunto. Aún tengo que recoger algo de información, pero por fin podré limpiar el nombre de mi madre, quizás entonces vuelva. Esto no lo hago por mi o por mi madre... Lo hago por mi hermana, Maya. Ella apreciaba mucho a nuestra madre, y desapareció demasiado pronto para ella. La pobre no pudo apenas conocerla, y más de una vez me ha contado que le gustaría poder volver a hablar con ella, aunque solo fuera una vez... En caso de que a mí me pasara algo, ella se quedaría prácticamente sola, y no quiero que tenga que pasar por eso a su edad, nunca le ha hecho mal a nadie y no se lo merece. Espero poder encontrar a mi madre después de esto... Bueno, tengo que irme ya. Cuídate, Diego.

Parece que todo sigue marchándole bien, me alegro tanto por ella... La
verdad es que me sienta muy mal no poder celebrar con ella esos
momentos de alegría, pero ya no le puedo hacer nada al fin y al cabo.
Respecto a lo que quiere conseguir, arrebatarle su poder a ese tal Redd
White, lo veo muy arriesgado, y más para estar ella sola. Espero que no
le suceda nada malo, lo que está haciendo es otro acto que demuestra lo
gentil que es... Ojalá pudiera decirle tan solo cuánto me alegro de
todo lo bueno que le está sucediendo, lo que comprendo su situación con
ese tal Redd White, y un simple te quiero... No he de lamentarme, así
solo conseguiré deprimirme. Habrá tiempo de hacer todo eso cuando
despierte por fin de éste sueño.

Las fuerzas parecen estar
retornando de nuevo a mí, si las cosas marchan bien, tengo la sensación
de que acabaré por despertarme tarde o temprano. He estado contando las visitas de Mia desde que me informó de lo que estaba haciendo y de la victoria de su aprendiz. Creo que han pasado un par de meses, quizás.
Últimamente la noto más distante, se puede percibir fácilmente que está
tensa. Será porque se acerca al final de su objetivo, por fin los
demonios de Mia serán ahuyentados para siempre. Oh, ahí viene.

-Ya casi está todo acabado, Diego. Tengo toda la información necesaria para derrotar a White de una vez por todas. Para asegurarme de que no la consigue, he estado hablando con mi hermana para que oculte las pruebas en un lugar seguro. Ésta misma noche le daré las pruebas, y si todo sale como lo he planeado, en tan solo tres días tendremos por fin el artículo publicado. Ha sido demasiado tiempo detrás de White, perdón si
te he molestado con todas mis preocupaciones, pero tenía que contarselo a alguien... Cuando todo acabe, me quedaré aquí contigo hasta que despiertes, así podremos hablar mucho más, ¿de acuerdo? Espero con ganas que llegue el momento de poder quedarme aquí contigo, me dan igual los casos. Solo me importas tú, Diego... Volveré mañana, ¿vale? Te amo...

Ella me dio un beso en la mejilla y se fue de nuevo.
La verdad es que éste asunto nunca me ha dado buena espina, pero seguro que todo sale bien al fin y al cabo. Aún así, desde que Mia mencionó por primera vez aquel nombre, un mal presentimiento, quizás una advertencia me ha estado rondando por la cabeza. Pero quién quiera que sea el que me hizo presentir eso, podría hacerselo saber a alguien,
porque yo poco puedo ayudar... En fin, espero que le vaya bien. Estaría
bien que trajera un poco de café, aunque sea solo por oler su
fragancia...

Han pasado unas horas desde nuestro último
encuentro. Lo sé porque los médicos dijeron que éste mes me
suministrarían una dósis de una medicina estimulante para que pueda
despertar. Me la suelen inyectar bastante tarde, aunque no recuerdo
bien la hora. Los efectos empiezan a notarse poco a poco, parece ser
que el otro día moví un dedo de la mano, Mia, se puso muy contenta,
estaba allí cuando sucedió. Un momento... ¿qué es eso, qué es esa
sensación? No... no sé que me está sucediendo por dentro, pero la
cabeza me está ardiendo. No es la medicina, nunca me ha sentado mal.
¿Qué es...? Ah, ¡el cuerpo me va a estallar de dolor!

-Mia... hermanita...
-¡¿Qué, quién ha dicho eso?!
-No puede ser... no... -alguien está sollozando-.

¿Qué me está sucediendo? ¿Qué pasa con Mia? Un momento... No, no puede ser. Ella no puede... Debe de ser mi imaginación, sí, eso es. Mañana Miavolverá, como siempre, y me contará lo bien que le ha ido la reunión con su hermana... Sí, solo es mi imaginación, me está jugando una mala pasada...

Ésta última noche ha sido horrorosa. Aún sigo
esperando a que Mia llegue, parece que se retrasa un poco, seguramente
serán imaginaciones mías, al fin y al cabo tampoco tengo ningún modo de
controlar la hora. De un momento a otro ella llegará y me hablará, como
siempre. Además, ¿qué podría pasarle? Como mucho podrían haberle
quitado la información y ya está, no hay por qué preocuparse. Oh, por
fin se abre la puerta, se me ha hecho eterna la espera.

-Enfermera, páseme esa jeringuilla.
-Sí, Doctor.
-Es extraño, hoy ha sido el único día que la señorita Fey no ha venido a visitar al paciente.
-Éste hombre lleva ya mucho tiempo en coma, seguramente ella se habrá cansado de esperar.
-No, la señorita Fey no es de esa clase de personas. No sé, puede que le haya pasado algo.

El doctor y la enfermera siguieron hablando, pero ya no prestaba atención a su parloteo. Era cierto, Mia no había ido hoy de visita, pero seguro que es porque está muy liada con el asunto de White, eso es. Tiene mucho trabajo y no puede pasarse por aquí, debe de ser eso. Cuando todo pase ella vendrá y se quedará aquí, junto a mí...

Ya ha pasado un mes. Llevo un mes sin noticia alguna de Mia. Pero ya no necesito noticias ni compasión de nadie. Ella se cansó de mí y me dejo tirado, ésa es toda la verdad. Me ha dejado aquí, en mi prisión de oscuridad, confinado eternamente a sufrir por ella, pero no pienso hacerlo. Medespertaré e iré a pedirle explicaciones, eso haré. Ahora estoy solo en mi taza de oscuridad, no tengo ni necesito a nadie más. Solo necesito algo, algo que anhelo desde el primer día en el que empezó este maldito entierro en vida. Necesito café. Mia me ha demostrado lo que son los abogados en realidad, puede que luchen durante un tiempo, pero luego, cuando ven que no van a ganar, se retiran a la mínima. Eso es lo que ha hecho ella y lo que hacen todos ellos... Y pensar que fui como ellos hace ya tiempo... Cuando salga de aquí empezaré de nuevo y... ¿Ese olor... es lo que pienso que es?

-Ca... Café.
-¡Ha hablado, el paciente ha hablado! -gritó un médico-. ¡Está despierto por fin! Tengo que ir a avisar a alguien.
-¡No!
-¿Có... Cómo dice?
-Antes de marcharse, por favor. Déme un poco de su...café...
-Claro, tome.
-¿Dónde está, por qué me han vendado los ojos?
-¿Disculpe?
-No veo nada, ¿qué me han puesto en los ojos?
-Ya veo -el médico de guardia me puso la taza de café en las manos-.
-Tome, beba.
-Por fin...

Me bebí el café de un trago. Lo saborée, noté como se deslizaba por mi
garganta de nuevo. Ardiente, como un torbellino de fuego. Había esperado tanto tiempo éste momento...

-Veo que le ha gustado.
-Sí, tiene un sabor... Distinto.
-En realidad la mezcla la realizó mi abuelo. Mi familia se dedicaba a crear
sus propias mezclas de café, el secreto de la última de todas pasó de
generación en generación y con ella la tradición en mi familia, aunque
como puede deducir, yo no seguí el camino de mi familia...
-¿Cómo se llama esta mezcla?
-Tiene un nombre muy extraño, la mezcla tiene una gran concentración de café puro, es el café más oscuro que existe en el mundo, sin duda. Mi
familia comparaba cada mezcla con una persona, pensaban que cada una
tenía un destino. Ésta es la más oscura, está llena de secretos que
pocos conocen, todas tenían nombres que pretendían ser de persona, y
además...
-Yo solo le he preguntado el nombre, no la historia al completo.
-Tiene razón, perdone. El nombre de esta mezcla era algo así como... Godot.
_________________

Perdón por el doble post, pero es que no cabía en uno solo ^^''' Bueno, muchísimas gracias a todos por leer y comentar el fic, espero que siga gustandoos tanto ^^ Los capítulos los publicaré los lunes normalmente, si no me quedo sin inspiración -.-'''

Un saludo, y gracias de nuevo! ^^

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me encata *_* ya estoy esperando al lunes :P


saluds¡¡

Zvarr! Deduzco que eres una persona ¿no? tambien deduzco que tu has hecho esto ¿no?,sigue asi es genial como yo el gran Detective de Primera !!Luke Atmey!! !Zvarri! Eres un Escritor de Primera pon la continuacion cuando puedas o te encontraras a Wendy Olbag en tu casa para cansarte.Me ha salido clavado xDDDD

Sique asi que em encanta tu historia ^^

Te esta quedadndo estupendo Neil Edgeworth :D

En serio, me encanta!!!! A esperar al proximo Lunes ^^

Apollo Justice escribió: Zvarr! Deduzco que eres una persona ¿no? tambien deduzco que tu has hecho esto ¿no?,sigue asi es genial como yo el gran Detective de Primera !!Luke Atmey!! !Zvarri! Eres un Escritor de Primera pon la continuacion cuando puedas o te encontraras a Wendy Olbag en tu casa para cansarte.Me ha salido clavado xDDDD

Sique asi que em encanta tu historia ^^

¡¡La Oldbag no!! (En cierto modo, yo también soy Edgey XD) Gracias por los comentarios ^^

Eso,eso!La Oldbag para ti!!!!
Me encanta!Pobre Mia...

Bueno, oldbags aparte... XD Otro lunes llega y otro capítulo del fic pongo, gracias por vuestros comentarios, feliz lectura! ^^
_________________________________

Capítulo 3: Solo en el mundo

Han pasado tres semanas desde que desperté. Los médicos me diagnosticaron que, efectivamente, he perdido la vista. Después de todos esos meses sumido en la oscuridad ahora por si fuera poco seguiré así el resto de mis días... Maldita sea, desde ahora siempre llevaré mi propio café a mano. Los médicos han contratado con un laboratorio para que me fabriquen algun aparato para poder visualizarlo todo, pero dudo que funcione. Hoy me dan el alta, dicen que el visor estará listo para dentro de un par de semanas, parece que es un artilugio bastante complejo. Desde que desperté Mia no se ha dignado a venir ni un solo día, ya no sé si debería buscar su bufete o simplemente desaparecer. Supongo que se ha hartado de mí y me ha dejado tirado, pero la verdad es que había tardado mucho en hacerlo. Mientras que me fabrican el visor contaré con la ayuda de uno de esos perros lazarillos, espero que el chucho se porte bien, no me gustaría ir chocándome contra las farolas de la calle, la verdad.

-¿Señor Diego Armando?
-Dígame.
- Ha llegado la hora de marcharse, lo tenemos todo preparado, yo le guiaré hasta la salida.
-Muy bien, adelante.

La verdad es que me parece una falta de responsabilidad que me dejen solo en mi estado por ahí, pero supongo que necesitan espacio en el hospital, después de todo. Cuando llegamos a la entrada me dieron al perro y me explicaron brevemente como darle órdenes para que me llevara a un sitio o a otro. Les di las gracias y les pregunté por la calle donde estaba el bufete de Mia, afortunadamente no queda muy lejos de aquí, no sé si me desenvolveré bien con éste animal... Bien, allá vamos.

Parece que mi peludo amigo estaba bien entrenado, después de todo, hemos llegado bastante pronto, y lo más sorprendente es que no he tenido ni un solo problema por la calle. Bien, me han indicado el patio y el número de la puerta, parece que aún hay buena gente en el mundo, después de todo... Eso sí, creo que debería mejorar la forma de tocar esa horrible armónica. El telefonilló empezó a transmitir una voz, era de una chica joven.

-Bufete Wright & Co., dígame.
-¿Wright & Co.?
-Sí, así es.
-Verá, creo que me he equivocado, buscaba el bufete Fey & Co.
-Oh... Vaya... Pase, pase.

Se escuchó el zumbido eléctrico de la puerta abriendose y entré. A tientas busqué el ascensor y me metí dentro, pulsé el segundo botón que pude tocar desde abajo, el del primer piso, supongo. Abrí la puerta con cuidado y salí a tientas.

-Espere, espere, yo le ayudo.

Era de nuevo la voz del telefonillo. Una mano me cogió del brazo y me guió despacio hasta lo que debía de ser el interior del bufete. La chica me ayudó a sentarme en el sofá y suspiré aliviado de parar por fin.

-Dígame, ¿que le trae por aquí? ¿Quiere un café?
-Sí, gracias.
Como iba a negarme a una sabrosa taza de café... Sería de locos.

-Tome, aquí tiene.
-Muchas gracias.
-Bueno, necesita un abogado, supongo.
-No, no, venía buscando a una amiga mía. Se llama Mia Fey, creo que éste era su bufete, ¿es usted su ayudante?
-Ya veo...

La chica se ha quedado muda, ¿qué es lo que está sucediendo aquí? Tengo un mal presentimiento acerca de todo esto.

-¿Me he equivocado de dirección?
-No, ha venido al sitio correcto.
-¿Entonces puedo hablar con Mia?
-Lo siento pero eso no va a ser posible.
-¿Ha salido?, puedo esperarla si hace falta.
-Verá, ésto me resulta muy complicado de decir... Mia ha muerto, yo soy su hermana pequeña, Maya Fey, encantada.

Entonces aquello que escuché... ¿Fue real? Mia... Mia ha muerto. No, debe de ser una especie de broma, ella no puede haber muerto. Voy a dejarle las cosas claras a ésta chica para que deje de tomarme por un idiota.

-Escucha, es muy importante que hable con Mia, así que déjate de bromas y déjame hablar con ella, por favor.
-Lo siento muchísimo, de veras, pero mi hermana ha... muerto.

La chica comenzó a llorar suavemente. Seguramente he metido la pata... Entonces Mia...

-Lo siento mucho, no podía creer que me estuvieras contando la verdad...
-Es así, y créame, lo siento muchísimo, ha tenido que ser bastante difícil para usted venir aquí y después encima se entera de que ella ha muerto... Perdóneme.
-No, tu no tienes la culpa... Pero, ¿cuándo murió?
-Fue hace unas semanas... Fue un asesinato.
-¿Un asesinato? ¿Cogieron al culpable?
-Sí, por suerte así fue, pero como usted comprenderá eso no cambia las cosas, Mia ya no va a volver...
-El asesino... ¿Cuál es su nombre?
-Redd White, ahora debe de estar encerrado en la cárcel. Lo ejecutan dentro de dos semanas.
-¿A quién pertenece ahora el bufete?
-Ahora pertenece a Phoenix Wright, era el aprendiz de Mia. Yo ahora me he convertido en su ayudante. Fue él el que hizo posible que Redd White acabara entre rejas.
-Ya veo...
-¿Dígame, de qué conocía a mi hermana?
-Éramos... Buenos amigos. Hacía mucho tiempo que no la veía y me apetecía hablar con ella, aún no había podido felicitarla por su nuevo logro. Pero ya ves, la vida da muchas vueltas...
-Entiendo...
-Bueno, siento muchísimo haberte hecho recordar todo lo que sucedíó, mis más sinceras disculpas, espero que os vaya bien con el nuevo trabajo.
-Gracias, señor....
-Diego Armando, y por favor, hablame de tú. Aunque bueno, ya me iba...
-Está bien, si alguna vez necesitasses algún abogado, ya sabes dónde encontrarnos.
-Lo tendré en cuenta.

Salí del bufete y al cabo de más de una hora llegué a duras penas al que había sido mi hogar antes de caer en ese maldito trance. Abrí la puerta y solté por fin a mi canino amigo. Había pasado por una tienda de animales a comprar algo de comida para él. Antes de que todo esto hubiera pasado, Mia siempre venía a recibirme al entrar... Mi pobre y dulce Mia... ¿Cómo pudo esa bestia hacerle algo así? Cuando tenga ese visor iré a ver al condenado de White, tendré unas palabras con él. Si yo hubiera estado despierto, las cosas habrían sido muy distintas... Si yo hubiera estado despierto, Mia seguiría con vida... Pero no, yo no tengo la culpa... La culpa es de ese maldito Wright. Phoenix Wright, nunca olvidaré ese nombre. Él pudo haber protegido a Mia, pero el muy zoquete la dejó morir sin más... Él es el único que tiene la culpa de que yo me encuentre tan solo...

Por fin me han llamado del hospital, ya tienen el visor, vendrán a traérmelo dentro de poco, supongo. Espero que ese chisme funcione bien, la vida en la oscuridad es más difícil todavía cuando me tengo que desenvolver por el mundo, y más estando tan solo... No ha habido ni un solo día en el que no me haya acordado de Wright y de White... Por otra parte espero deshacerme pronto también de este bicho, su comida no es muy barata que digamos, y además ahora no tengo trabajo, tan solo una mísera pensión de minusvalía, digo yo que podrían haberme dado algo más, puesto que el caso es grave... No sé, supongo que será porque pronto voy a recuperar la vista... O eso dicen. Llaman a la puerta, debe de ser el repartidor de mi visor.

-Buenos días, ¿es usted el señor Diego Armando?
-Sí, pase.

Nos sentamos en unas sillas y el repartidor me explicó varias precauciones que debía tomar y algunos inconvenientes.

-Conociendo usted ya todo eso, es hora, de que reciba usted el visor, yo mismo se lo pondré, ya está regulado con los datos que nos facilitaron desde el hospital.
-Gracias.
-Bien, cierre los ojos...

Le hice caso y un instante después noté la fría pieza de metal que encajaba con mi cabeza acoplándose perfectamente.

-Ya está, puede abrir los ojos.

Le hice caso y los abrí. Con una alegría como pocas veces la había sentido y que me sacó de mi pesadilla durante un instante pude volver a ver mi piso otra vez, me levanté y comencé a observar todo lo que me rodeaba.

-Gracias, muchísimas gracias.
-No hay de qué, hombre... Hay que ver como avanza la tecnología. Pero recuerde, si se pone usted muy nervioso el visor puede sufrir unos leves daños, procure permanecer tranquilo.
-Sí, ya lo sé.

Guíe de nuevo al operario hacia la puerta, donde se fue con el perro que me había servido durante aquella última semana. En realidad echaré de menos un poco a ese chucho... Ha sido mi única compañía desde que desperté, después de todo. Bien, ahora voy a sentarme y a tomar una buena taza de café para celebrar esto. Es maravilloso, creo que no valoramos lo que tenemos hasta que no lo hemos perdido, realmente. Últimamente todo lo que me ha pasado me ha servido para darme cuenta de ésta obviedad, supongo... Aquí hay una foto en la que aparecemos Mia y yo... Y aqui... Y aquí... Están por todas partes. Ya sabía yo que la felicidad iba a durarme poco... Pero al menos ésto es un comienzo, ¿no? Acabaré por encontrar un futuro, claro que sí... Creo. De momento me voy a acercar al centro de detención, hay una visita que debo hacer...

-Sí, es en esa sala.
-Gracias agente.

Avancé por el pasillo hasta el final y abrí la puerta que me habían indicado, la de la izquierda. Allí había un tipo sentado al otro lado del cristal, que más que en una cárcel parecía estar en una suite del mejor hotel de la ciudad. Ese personaje desprendía arrogancia en estado puro. Llevaba las manos llenas de anillos y tenía el pelo teñido de un color tirando a violeta, con un rídiculo bucle al final.

-¿Redd White?
-El mismo, ¿para qué me molesta?
-Tenía ganas de hablar con usted, ¿sabe?
-Puede ser, pero una persona como yo no puede perder tiempo con el primer rarito con una máscara que pasa por ahí...
-¿Una persona como tú? ¿A qué te refieres? ¿A una rata inmunda, a un asesino, o tal vez a las dos cosas?
-¿Quién es usted?
-Mi nombre no te importa, estoy aquí para hacerte unas preguntas a las que vas a responder.
-¿Y por qué tendría que hacerlo?
-Entre tú y yo, si no lo hicieras, escogería la manera más cruel que encontrase de liquidar a una rata como tú.
-Veo que me tiene mucho aprecio... Bueno, pregunte, rapidito.
-¿De qué conocía a Mia Fey?
-Mia Fey... Mia Fey... Ah, sí, mi querida Mia Fey. Ella me estaba siguiendo la pista, creo, se pensaba que yo no me había percatado, la muy estúpida...
-Como vuelvas a insultarla...
-¿Qué, qué me harás? ¿Me vas a pegar, me vas a matar?
-Maldito seas...
-Yo ya soy hombre muerto, como te llames... Igual que Mia, ¿fuiste al funeral? Debió de ser una ceremonia preciosa, ¿verdad que sí?
-¡Cállate!

Sin darme cuenta había golpeado con fuerza el cristal de separación, que casi se rompió. White, al otro lado, estaba riéndose como si le fuera la vida en ello.
-Qué tenemos aquí... Si resulta que amabas a esa inútil, vaya vaya...

Se hizo un silencio imperturbable después de la última frase de White. Después de unos minutos le contesté.
-¿Sabes, White? Creo que tengo cierta información sobre ti... Información que me dejó Mia antes de morir.
-¡Es imposible! Yo quemé todos los documentos, ¡todos!
-Mia ha muerto ya, pero yo me voy a encargar de que tu vida sea un verdadero infierno, al menos lo poco que queda de ella. Si no me equivoco los presos odian a los peces gordos corruptos como tú, ¿no es así? Seguro que la noticia enseguida llegaría a la cárcel, sería una lástima, ¿verdad?
-¡No! ¡Estás mintiendo!
-No miento, Mia guardaba unas copias de todos sus documentos acerca de ti en casa... Y me he encargado de enviarlos al periódico, con algo de suerte, mañana mismo todos sabrán lo que hiciste, White.
-¡Pero tú estás loco! ¡Tendré suerte si llego al día de mi ejecución!
-Estuve pensando mucho tiempo, White. La mejor forma de matar a una rata como tú, es pisotearla hasta darle el golpe de gracia. Quién sabe, quizás tu no llegues al golpe de gracia... Solo espero que te haya tocado la cárcel más conflictiva del Estado, para que te pudrás dentro mientras te apalean día tras día.
-Eres cruel...
-¿Me hablas de crueldad? ¿Tú que mataste a una persona simplemente por que te dió la gana? Ojalá te pudras en el infierno, White, y da gracias a que no me encuentro en la misma habitación que tú.

Salí de la habitación con paso firme y decidido, mientras que White aullaba y me suplicaba que esperase. Cerré la puerta mientras que escuchaba los últimos gritos de White escaparse por su boca junto a su última gota de cordura. Hace un tiempo lo que acababa de hacer me habría parecido horrible... Pero ahora mismo me parece que me he quedado corto.

Al día siguiente en el periódico apareció la noticia que había mandado yo mismo sobre toda la trama de corrupción que había tejida sobre White, entre la cuál había un detonante final... White había estado cogiendo durante años el dinero destinado al mantenimiento de la cárcel dejando ésta última convertida en un caos, y provocando con ello una especial ira en sus residentes. A la semana siguiente, otra noticia encabezó la primera plana, a tan solo unos días de su ejecución, Redd White había muerto en una reyerta producida por los presos que se habían unido en su contra, y acabaron por matarlo después de una semana de amenazas y constantes malos tratos, según los testimonios de los guardias de la prisión. Leí la noticia una y otra vez, riendome a carcajadas, por fin aquella rata había obtenido lo que se merecía, y yo había contribuído a ello.

Por fin he vengado a Mia, me siento mejor... Pero ella ya no está aquí... Observando el atardecer una imagen viene a mi mente...

-Diego, esto es precioso... Creo que venir aquí a vivir ha sido la mejor decisión que podía haber tomado, mira la puesta de sol...
-Puede que las vistas sean bonitas... Pero tú eres realmente la que ilumina mi mundo. Sin ti ésto no tendría sentido.
-Diego...

Cuando me volví a la realidad me di cuenta de que estaba llorando... No, no puedo permitirme llorar. Aún quedan muchos cabos sueltos en ésta historia, y hasta que todo haya pasado, no pienso derramar ni una sola lágrima...

WOOOOOW *______________________*
Me has hecho llorar, en serio! (estabas algo enfadado cuando escribias, no? ^^)
Aunqueeeeee, diego no despierta un año antes del T&T? Wno, seran cosas mias ^^
Salu2!

Dios!!!Pero que bonito es esto!!!!!!!!

Como no me habia fijado antes!!?????

Que bonito en serio,si señor,se te da muy bien escribir de verdad,que bonito,no tengo palabras *.*

Muy bien Sr.Cafe y Te verde sigue asi y no habra accidente.... xD

Apollo Justice escribió:Muy bien Sr.Cafe y Te verde sigue asi y no habra accidente.... xD

Nop, habrá tazas de Café hasta en tu carnet de identidad ¬¬ XD Ahora en serio, gracias por leer el fic, me alegro de que os guste ^^ Y no, no estaba cabreado escribiendo, directamente es que con White me parece que me he quedado corto XD Es de lo peorcito del juego, y un final así es el que se ha buscado... Uf, ahora parezco el asesino adicto al té XD Bueno, pues gracias de nuevo a los lectores ^^ Os adelanto de que en el próximo capítulo habrá actuación mia (no os esperéis nada descomunal tampoco... Es un pequeño detalle que pienso que no quedaría mal ^^)

Un saludo!

Como siempre Neil, fabuloso!!!*.*

Me encanta tu fic, es de los pocos que me han llenado en tan poco tiempo.Algunas faltas escondidas por allá, pero el estilo y la cohesión las ocultan perfectamente.Tu estilo de narración es  muy bueno, pero aunque algunas veces se confunden los turnos de palabra de algunos personajes.Pese a eso, resulta impecable.Respecto a lo que dijeron antes sobre que Diego despertó antes del T&T, creo que el autor no ha especificado si la historia se rige a la línea temporal del juego, por lo que puede resultar perfectamente válida (en caso de que diga lo contrario el autor, ya me callo).Es una de esas historias que te enganchan desde la primera línea y que no puedes dejar de leer.Tampoco le ha faltado su toque humorístico (Ca-café...XD).Te animo a que sigas escribiendo como has hecho hasta el momento.Espero que sigas teniendo inspiración, y que no te fijes mucho en otros fics; es bueno cultivar el estilo personal.Saludos ^_^